
La limonada es una bebida que te ayuda a mantenerte hidratado. También protege contra la formación de cálculos renales, ya que contiene ácido cítrico, que puede unirse al calcio y ayudarte a pasar por los cálculos renales. También es rico en vitamina c, que puede aumentar la absorción de calcio y ayudar a tus huesos a mantenerse fuertes.
Promueve la hidratación
Beber limonada puede aumentar la micción y expulsar el exceso de líquido y residuos de los riñones. Esto también ayudará a reducir el riesgo de cálculos renales. Sin embargo, si padece reflujo ácido gástrico, es mejor evitar beber limonada con el estómago vacío, ya que esto agravará la enfermedad.
Los cálculos renales son el resultado de un contenido excesivo de oxalato de calcio en el cuerpo. Beber limonada puede ayudar a prevenir la formación de cálculos renales aumentando el contenido de citrato en la orina. El Citrato es un inhibidor de los cálculos que impide que la sal y los minerales se combinen entre sí para formar cálculos renales.
Además, el jugo de Limón es una excelente fuente de vitamina C. ayuda a reducir el estrés oxidativo y protege al cuerpo de diversas enfermedades. También mejora la absorción de hierro y promueve un sistema digestivo saludable. Beber limonada al día es beneficioso para las personas con enfermedad renal crónica, ya que puede aumentar el eliminación de creatinina (la cantidad de urea que los riñones eliminan de la sangre). Sin embargo, es importante beberlo bajo la Guía de un médico.
Protege contra la formación de cálculos renales
La limonada crea un ambiente alcalino en el cuerpo y evita la formación de cálculos renales. También promueve la hidratación, es rica en vitamina C y ayuda al funcionamiento normal de los riñones. Sin embargo, si tiene enfermedad renal, no debe beber limonada.
Los riñones tienen muchas funciones, incluida la eliminación de toxinas en la sangre, el control de la presión arterial y la regulación de la densidad ósea. También regulan los niveles de productos químicos, como la creatinina y el ácido úrico. Los niveles altos de creatinina pueden ser un signo de problemas renales.
El Citrato en el jugo de limón se une al calcio urinario y ayuda a detener la formación de cálculos renales. Los estudios han demostrado que el jugo de limón puede aumentar significativamente los niveles de citrato en la orina y reducir el riesgo de formación de cálculos renales a base de calcio. Sin embargo, durante todo el periodo de seguimiento de dos años, la adherencia de los pacientes a la suplementación con jugo de limón disminuyó gradualmente, y es probable que los resultados de este estudio sean desviados. Esto puede explicar por qué los beneficios del jugo de limón para reducir la recurrencia de cálculos no se han logrado completamente.
Produce un ambiente alcalino en el cuerpo
El Limón es una fuente importante de vitamina c, que se sabe que promueve un sistema inmunológico saludable. También son ricos en otros nutrientes, incluidos potasio, magnesio y calcio. El ácido cítrico en el limón ha demostrado ayudar a prevenir la formación de cálculos renales, que pueden descomponer los cálculos de oxalato de calcio en trozos pequeños y expulsarlos del cuerpo.
Un estudio de 2019 encontró que las personas que beben limonada al día sufren menos cálculos renales que las que no beben. Los investigadores especulan que el beneficio de beber limonada es que puede aumentar los niveles de citrato en la orina.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que el cuerpo humano regula el pH muy estrictamente. Esto significa que nadie que afirme ser alcalino debe tomarse en serio. De hecho, las declaraciones de salud de aquellos que afirman ser alcalinas a menudo se basan en el mito de que ciertos cánceres no pueden crecer en entornos alcalinos.
Es una buena fuente de vitamina C
La vitamina C en el limón ayuda a tu cuerpo a combatir las infecciones y fortalecer tu sistema inmunológico. También puede prevenir la formación de cálculos renales. El jugo de limón también contiene ácido cítrico, que evita que la sal y los minerales se adhieran a los cálculos renales existentes. También puede detener la cristalización de calcio y oxalato.
Nuestros riñones son responsables de expulsar toxinas y residuos de la sangre, controlar la presión arterial, regular la salud ósea y controlar los niveles de productos químicos como la creatinina. Beber limonada puede aumentar la ingesta de potasio, mejorando así la función renal y reduciendo el riesgo de enfermedad.
Sin embargo, si tiene reflujo de ácido gástrico, no debe beber limonada porque empeora la enfermedad y causa síntomas como tos, dificultad para tragar, acidez bucal y indigestión. Además, puede causar sed excesiva y orina. Beber limonada con el estómago vacío puede agravar el reflujo ácido gástrico, ya que aumenta la producción de ácido en el estómago.