
El aloes es una planta poderosa que purifica los riñones. También es un diuresis natural y beber su jugo puede ayudarte a mantenerte hidratado. Sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias también pueden ser beneficiosas para los diabéticos.
La administración oral de látex de aloes puede causar espasmos abdominales y diarrea. Tampoco se recomienda su uso durante el embarazo y la lactancia, ya que puede estimular la contracción uterina y desencadenar abortos espontáneos. También puede interactuar con algunos medicamentos, incluidos medicamentos para la diabetes y medicamentos para enfermedades cardíacas.
El aloes es un diuresis natural
Las secreciones de las hojas de las plantas de aloes contienen polisacáridos, vitaminas, minerales, enzimas, aminoácidos y antraquinonas, como la Crotona. También contiene compuestos fenoles, como los flavonoides, y otros ingredientes que promueven la salud y previenen enfermedades. (cook Carolina del norte, sur de samman)
Los estudios han demostrado que el aloes protege contra las úlceras gástricas. Según el estudio publicado en el Journal of Medicinal Plants research, puede hacerlo evitando que el ácido llegue a la pared del estómago. También puede ayudar a tratar problemas gastrointestinales como la acidez estomacal.
Sin embargo, si está tomando medicamentos para la diabetes, evite tomar aloes porque puede causar hipoglucemia. También interfiere con la coagulación sanguínea y hace que su uso combinado con ciertos medicamentos sea peligroso, como el sevoflurano para anestesia general. También puede reducir los niveles de potasio, lo que puede causar hipopotasemia. Esta situación aumenta el riesgo de algunos efectos secundarios de medicamentos, incluyendo la disulfiramina y el colestericol.
Es un antioxidante natural
El aloes contiene una variedad de antioxidantes, incluidos polifenoles, flavonoides y tocoferoles. También inhibe las lipoxidasas y la ciclooxigenasa, que causan el deterioro oxidativo en los alimentos. Estos antioxidantes pueden prevenir el daño a las células y tejidos del cuerpo.
También es un antiinflamatorio natural. Un estudio reciente encontró que la aplicación local del gel de aloes reduce la inflamación causada por los rayos ultravioleta en la piel humana y mejora la apariencia de la psoriasis.
Además, un ensayo clínico doble ciego encontró que el gel de aloes mejora los síntomas de la Fibrosis submucosa oral, una enfermedad crónica que causa dolor e inflamación oral. Sin embargo, beber jugo de aloes diariamente puede aumentar el riesgo de diarrea y causar desequilibrios electroliticos.
Además, la fermentación endógena del ácido butírico por hongos en plantas de aloes puede reducir la acumulación de toxinas uremia derivadas de la microbiota intestinal, como el sulfato de Indol y el sulfato de P - cresol, que están relacionadas con la progresión de la ckd.
Es un conservante natural
El gel de esta planta contiene propiedades antisépticas que evitan que las bacterias crezcan en la piel, especialmente en las heridas. También puede detener el crecimiento de hongos y parásitos. De hecho, puede matar hongos y parásitos resistentes a las antibióticos. El aloes también se puede utilizar para tratar enfermedades gastrointestinales como la psoriasis y la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
En un estudio, un equipo de investigadores aplicó una gruesa capa de gel de aloes a las plantas de tomate y descubrió que redujo la cantidad de bacterias dañinas en el tomate. Esto podría reducir la demanda de productos químicos peligrosos que prolonguen la vida útil de las frutas y verduras.
Es mejor usar aloes localmente en lugar de por vía oral. La administración oral de aloes puede causar espasmos abdominales y diarrea y puede causar desequilibrios electroliticos (niveles bajos de potasio). Tomar durante mucho tiempo puede aumentar el riesgo de estreñimiento. Además, puede contaminar tu colon, así que si planeas hacer una colonoscopia, es mejor evitar tomarlo.
Es un antiinflamatorio natural
Aplicar gel transparente de aloes a la piel puede reducir el dolor causado por las quemaduras y curar las heridas. Debido a sus compuestos antioxidantes, también tiene propiedades antiinflamatorias. El aloes también puede ayudar a tratar la diabetes, ya que puede reducir los niveles de azúcar en sangre. Sin embargo, los diabéticos no deben tomar este medicamento para controlar el azúcar en sangre. El aloes oral puede causar efectos laxantes y desequilibrios electroliticos. Además, no se recomienda tomarlo durante el embarazo, ya que estimula la contracción uterina y provoca abortos espontáneos. Las personas alérgicas a las plantas de la familia Lily también lo prohíben.
Los estudios han demostrado que el consumo de jugo de hoja de aloes ayuda a prevenir el daño renal causado por el estrés oxidativo crónico. Además, puede mejorar la salud intestinal reduciendo la acumulación de residuos tóxicos en el cuerpo. Estas toxinas son producidas por la microbiota intestinal, incluyendo el sulfato de Indol y el sulfato de P - cresol, que aceleran la progresión de la ckd. Las bacterias endógenas que producen ácido butírico en el aloes pueden combatir estas sustancias tóxicas.